El Pan de la Palabra. DOMINGO IV DE PASCUA



PARROQUIA Nª Sª DE LA SALUD - SEVILLA - DOMINGO IV DE PASCUA, C – 12 DE MAYO 2019
(Tomada de PARROQUIA DE SAN PÍO X)

ORACIÓN PARA DISPONER EL CORAZÓN:

Espíritu de Vida que has resucitado al crucificado, escucha nuestra súplica de criaturas necesitadas de vida. Ven a recrear nuestra vida; a dar esperanza a nuestro porvenir; a dar alegría a nuestro caminar; a dar fuerza a nuestra debilidad… Abre nuestros oídos para acoger la Palabra de la Vida. Tú que nos conoces, haz que seamos hombres y mujeres empapados de Amor y vivamos con la convicción de que Jesús es nuestra fuente de agua viva.

JESÚS, NUESTRO BUEN PASTOR, ES EL AMIGO

El Evangelio de hoy, nos presenta a Jesús como el “Pastor”. El mismo nombre que la Biblia da a los líderes que gobiernan y dirigen al pueblo. Sin embargo, cuando los primeros cristianos le llaman “Pastor”, no lo hacen para presentarlo como jefe y caudillo de un pueblo, sino para destacar su preocupación por la vida de las personas. Jesús es “Pastor” no porque quiera gobernar, vigilar y conducir a nadie, sino porque Él es capaz de dar su vida por los demás.

Sus palabras, “mis ovejas escuchan mi voz, y me siguen y yo les doy la vida…”, no implican una relación de dominio y sometimiento, sino todo lo contrario, una relación de amistad y confianza mutua entre Él y nosotros. Por eso, en lugar de hablar de “Cristo Pastor” podríamos hablar de “Cristo Amigo”.

Si acudimos al mismo evangelio de Juan, nos encontramos con estas palabras, puestas en boca de Jesús: “Ya no os llamo siervos, os llamo a amigos, porque os he dado a conocer todo lo que oí de mi Padre”. Jesús no es solo el Señor que salva, sino el Amigo cercano que comprende y acompaña.

En nuestra época, hablar sin más de Pastor, en muchas mentes, puede entenderse como si los que seguimos a Jesús fuéramos un “rebaño” poco consciente y responsable. Pero, además, llamar a Cristo, Amigo, puede tener hondo significado para tantas personas que viven en soledad.

Hay ya demasiados dirigentes y gobernantes que “se imponen desde arriba”. Jesús es el amigo que, desde abajo, desde la amistad y la confianza, acompaña nuestro camino por la vida. Es decisiva la relación de amistad con el Buen Pastor, hasta distinguir su Palabra de otras palabras.

LA PALABRA DE DIOS: JUAN 10, 27-30

“En aquel tiempo, dijo Jesús: Mis ovejas escuchan mi voz, y yo las conozco, y ellas me siguen, y yo les doy la vida eterna; no perecerán para siempre, y nadie las arrebatará de mi mano. Mi Padre, que me las ha dado, supera a todos, y nadie puede arrebatarlas de la mano del Padre. Yo y el Padre somos uno”.

PARA COMPRENDER MEJOR EL TEXTO:

CONTEXTO: Se trata de un texto que no habla de apariciones, pero también es Pascual. Juan nos habla de Vida definitiva: Una vida que hay que empezar a vivir aquí y se prologa en la vida eterna; que tiene que ver, no con la vida biológica, sino con ese “nacer de nuevo” y “del Espíritu”. Jesús es el Buen Pastor, el Amigo, que da la vida por sus ovejas. Bien entendido que "dar la vida" no significa aquí dejarse matar, sino "desvivirse" en beneficio de los demás y dar vida a los demás.

EXPLICACIÓN: La imagen del pastor, en el AT, se emplea para describir el cuidado de Dios para con su pueblo y Jesús la asume, no para presentarse como superior a los demás, sino para dar a entender que, entre nosotros, hemos de relacionarnos como personas iguales. El se presenta como servidor de los demás y, por tanto como modelo de relaciones humanas. Por lo que, seguirle a él, es aceptar darse a los demás como Jesús y como Dios se da. Es aceptar a los demás como lo que más importa.

La buena noticia de Jesús resucitado consiste en manifestar que hay una nueva manera de vivir que está más de acuerdo con las exigencias profundas del ser humano. Lo que pasó en Jesús tiene que pasar también en nosotros. Éste es el meollo del misterio pascual.

CONCLUSIÓN: El Pastor, el Amigo, nos da la vida definitiva porque él mismo es la Vida. La humanidad puede ser una familia por la Resurrección. Ahora nos corresponde a nosotros, estando atentos a su voz, construir esa única familia humana comenzando por nuestra propia familia, nuestra comunidad, nuestro bloque, nuestro barrio… El que vive para siempre estará con nosotros hasta el final empujándonos desde dentro para que se haga realidad, desde ya, su proyecto de unidad y fraternidad. Así, también nosotros podremos decir: Nosotros con Cristo, con el Padre somos uno y la fuerza de nuestra unidad es el Espíritu Santo.

PARA DIALOGAR EN GRUPO O EN FAMILIA

Jesús, “buen Pastor” no está por encima de la comunidad, mucho menos por encima de la humanidad. “Él no es el jefe y nosotros borregos”. Él cuida de los demás y nosotros hemos de hacer lo mismo. Vamos a dialogar acerca de como vivimos esto:

Realmente ¿vivimos ese “pastoreo mutuo” entre nosotros?
¿En que actitudes y prácticas se manifiesta?


PARA REFLEXIONAR PERSONALMENTE

¿Soy “buen pastor” en mi familia, en el trabajo en mis relaciones vecinales?

PARA ORAR PERSONALMENTE Y/O EN FAMILIA

  • Prepárate para encontrarte con el Buen Pastor, con el Amigo...
  • Relee el Evangelio, verás como la primera actitud del discípulo de Jesús es “la escucha”, “mis ovejas escuchan mi voz”. Habla con Jesús de tu manera de escucharle, de tus dificultades para atenderle…
  • La segunda actitud es “la amistad”. Jesús te conoce y tú le conoces. El mejor amigo, decía Malagón es el que “después de conocerme me quiere”. Así es Jesús contigo. Disfruta de esta amistad llena de amor…
  • Recuerda que vives en un mundo de injusticia y de soledad, pero la ternura de Jesús te envuelve. ¿Qué puedes hacer para hacer presente entre tu gente esa ternura de Dios que es Jesús? Termina este rato de oración dando las gracias a Dios:

Gracias, Jesús, Buen Pastor y mejor Amigo,
por cuidarme y acompañarme siempre;
por sufrir con el dolor y la injusticia.

Gracias por alentar nuestra esperanza,
animar la solidaridad de nuestra marcha
y bendecir los empeños de nuestra lucha.

Gracias, por llamarme, amigo, amiga;
por alentar mi compromiso por abrir caminos de justicia y fraternidad.


LO QUE QUIERO SER…

Quiero ser pastor-amigo que vele por los otros;
árbol frondoso, que dé sombra al cansado,
y fuente donde beba el sediento.

Como tú, quiero ser compañero del perdido;
fuerza para el parado;
alegría para el triste;
esperanza solidaria para el perdido;
bastón para el débil anciano;
manantial de esperanza para el deprimido;
casa abierta para el desahuciado;
voz para el violentamente silenciado…
Como tú, quiero ser
hermano de otros hermanos.

Quiero ser “paisa” del emigrante;
amigo de los enemigos
carta de amor para el solitario,
y grito fuerte para el sordo:
el explotador y el opresor,
el maltratador e injusto,
el comodón e insolidario…

Pastor, árbol o fuente,
fuerza, alegría, esperanza
bastón, manantial, casa, voz
amigo, carta, grito…,
y hermano de otros hermanos
Lo que tú quieras, lo que tú pidas,
lo que tú sueñes, Señor...,
eso quiero ser.

DOMINGO IV DE PASCUA 12 de Mayo de 2019

Hechos 13, 14.43-52: “Yo te hago luz de los gentiles, para llevarles mi salvación”
Apocalipsis 7, 9.14-17: “El Pastor nos conduce hacia fuentes de agua viva”
Juan 10, 27-30: “Yo conozco a mis ovejas”

RECUERDA

  • Miércoles, 15 de mayo, a las 17:30: Ensayo de primera comunión
  • Viernes, 17 de mayo, a las 17:30: Celebración del perdón y ensayo para niños de 1ª comunión
  • Sábado, 18 de mayo, a las 10:30 y 12:00: Primeras Comuniones
  • Domingo, 19 de mayo: Fiesta de Nª Sª de la Salud









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